Alternativeando por el MAZ de Basauri...

Los días de calor no son muy habituales a estas alturas de año en Euskadi. Quizá por éso, tras dos bonitas jornadas rondando los 30º era lógico que la niebla y las lloviznas hicieran su aparición estelar cuando menos necesarias eran.

Pero quejarse no es una opción. Y menos cuando tienes la suerte de tener dos entradas para ver a New Raemon y Nacho Vegas en Basauri... y si encima puedes viajar por la A8 con una bonita selección mezclando canciones de Tindersticks, Temper Trap, MGMT... en el Spotify y los parabrisas secan los restos de melancolía que todos los días de lluvia tienen. Todo parece formar parte de una escena semiperfecta en la que los actores secundarios improvisamos libremente durante tres o cuatro horas...

Llegamos a Basauri a las 20.30. Tuvimos la suerte de aparcar cerca del "Sozial antzokia" y los simpáticos basauritarras nos recomendaron una hamburguesería para llenar el estómago antes de que las mariposas rebolotearan por nuestra panza cervecera.

A las 21h, tras una rápida digestión subiendo la cuesta que nos separaba del teatro, nos dejamos atraer por los aromas del MAZ y tras sellar nuestras manos en la entrada, procedimos a tomarnos el postre: una cerveza, y a esperar a que Ramón Rodríguez y su banda salieran al escenario.

Les perdonamos la relativa impuntualidad en cuanto los primeros acordes del concierto empezaron a sonar. Y apurando los tragos de la primera cerveza nos deleitamos, como unos meses antes en Pasajes, con  la fusión de acordes acejillados, melodías de piano "MarcPratsianas", la combinación elemental, pero práctica, bajo-batería y los retoques de una guitarra principal escondida en una esquinita del escenario con la pulida voz del new Raemon, que aunque cuando canta en agudo tiene un aire a Nek (el de Laura no está), para el resto tiene unos registros de voz maravillosos que mejoran las canciones de Nueva Vulcano (con los que deben tener muy buena relación), o las letras: mitad abstractas, mitad superrealistas de canciones imprescindibles para un buen día de Resaca.

Ramón dice que tienen un hit y medio, pero viendo el concierto es evidente que se quedó corto: porque al margen de que "cafeteras" fuera más aplaudida que las demás, en Euskadi vende mucho lo de "lo bello y lo bestia", y el "tú, Garfunkel" ya es un clásico en muchas listas de reproducción, el "saben aquel que diu" tiene su toque, y lo trascendental tiene su atrevimiento receloso en "soñar la muerte" o "hundir la flota"... por lo que aunque se vistan de sport y se pongan serios podríamos decir que la organización del MAZ acertó invitando a New Raemon a esta fiesta de lo "alternativo". De hecho fuimos much@s los que nos quedamos con ganas de más... y ya van dos veces; 

Tras el primer telonazo, salimos a relacionarnos con el resto de los asistentes, fumar un cigarrito, pedir otra cerveza... y, evidentemente, a hacer tiempo hasta que los pipas cambiaran los bártulos de New Raemon por los de Nacho Vegas.

El asturiano saltó a escena cerca de las once de la noche con su habitual aire de rockero de los setenta y con un pelo con el que parecía homenajear al recientemente fallecido Vidal Sasoon, rodeado por su inseparable Abraham y un batería extremadamente joven, (y que gastó, suponemos, el resto del bote de champú), que nos causó una gratísima impresión.

La admiración que le profesamos al genio asturiano no nos deja ser objetivos. Y por mucho que a esas horas de la noche se agradezca un poco más de ritmo, ver a gente de todas las edades berrear acompañando la voz desgarrada de Nacho no tiene precio. Y aunque la negatividad y las alusiones a la mala situación política pueden dejarte aplatanado en determinados momentos, viajar a través del "dry Martini SA", el "morir o matar", o "la gran broma final" compensa la cadencia del ritmo con un aire poético que contagia las caderas cerebrales de tod@s los allí presentes. Creo que hasta Michi Panero se pasó a vernos bailar y a encargarse de fomentar el uso de batín entre los caballeros y señoras que degustaban cada nota, de cada canción.  

Antes del bis... nos incitó a "disfrutar" de la noche con el "taberneros" y su canción de "amor" a Gijón y su mensaje de que "los tristes  no deberían ganar nunca", a lo que @Jonntantra respondió con su habitual acidez twitteando: "Es curioso, todo el mundo cree que su ciudad es triste, pero sólo Nerón sé atrevió a quemar la suya..." y un lacónico y directo: "Yo, antes, también pensaba que la vida es como la pinta Nacho Vegas en sus canciones, pero ya no".

Puede que tenga razón y ser positivo sea una actitud necesaria en los tiempos que corren... seguramente por éso, hoy tenemos la certeza de que  buscar lo alternativo en Basauri fue una buenísima idea.