Superbowl 2010

Hay veces que sin llegar a subirte a un avión el Jet Lag te afecta...

Es lo que tienen los cambios horarios... que, sin venir a cuento, uno se vuelve gringo, se pinta de verde y blanco la cara, se contagia del frío de Dallas y busca una pantalla gigante en la que ver a 30 o 40 bestias dándose de hostias persiguiendo un melón.

Siendo chominista diría que estos americanos no tienen ni idea de lo que es el fútbol; pero después de cuatro horas delante del televisor tu percepción cambia. E imaginar a 100millones de "ceporros" compartiendo patatas fritas, perritos y palomitas sentados en un sofá o metidos en un bar hartos de cerveza te hace pensar que algo tiene que tener este "deporte" para llegar a aglutinar la atención de tanta gente.

La globalización nos ha saturado de anuncios de Coca Cola, menús de Mc Donalds, Levis, sudaderas Gap, zapatillas Nike,  películas bélicas, cenas de acción de gracias, el capitalismo, Halloween... hemos exportado a nuestros mejores jugadores de Basket a la NBA, nos han cambiado costumbres imponiéndonos modas pasajeras, han plagado nuestras conversaciones de anglicismos y el sueño americano tiene su propia versión en cada rinconcito del mundo.

Pero ayer sufrimos una conversión espontánea. Y en lugar de quedarnos en casa, como casi todos los domingos, mis amigos y yo quedamos para disfrazarnos de americanos y tratar de disfrutar, como se intuye que ellos lo hacen, viendo este espectáculo mediático al que llaman Superbowl.

La espera se hizo larga; más que nada porque no quisimos perder las buenas costumbres domingueras y nos dio por salir a eso de las siete a beber unas cervezas, picar algo, hacer un poco de vida social... parecía más un sábado que otra cosa; hasta que llegó el "toque de queda" y a eso de las diez, todo el mundo desapareció y nosotros aprovechamos para cenar y tratar de enterarnos de algo de lo que nos disponíamos a ver: reglas del juego, contendientes...

Lo más fácil fue decidir con quien íbamos: Entre un equipo con 6 títulos, el último hace dos años, de una ciudad como Pittsburgh... y un equipo "pequeño" que ha sufrido numerosas lesiones a lo largo del año: nos quedamos con Green Bay: o Green day Paquetes como nos empeñamos en llamarlos durante el resto de la noche. (la "G" de gilipollas del casco acabaría de convencernos, del todo, un par de horas después).

A continuación, visto que el taxista nos había abandonado, nos propusimos buscar un especialista que nos explicara el porqué de las líneas azules y amarillas, el número de intentos para sobrepasar las 10yardas, la importancia de la recepción, los touchdown,  la diferencia entre un quarterback, running back, placadores, marcadores... Encontramos a David, que nos explicó el juego por encima y de paso se unió a la fiesta. Y así a eso de las 0.30 fuimos al bar de Luis, montamos una timba de póker, escuchamos a Christina Aguilera "cagando" la interpretación del himno americano. Y nos dispusimos a "disfrutar" del partido. Al principio con los comentarios del digital plus (por cierto excelentes (al menos, para los no eruditos como nosotros): igual que la retransmisión) y luego, cuando intuimos que los de "Carrusel" ya estarían, más o menos como nosotros:  borrachos, tratamos de poner el modo Radio del spoty y lo cierto es que fue divertidísimo; Una pena el retardo y que la conexión a internet nos dejará sin twitter y facebook para comentar las jugadas... pero celebramos cada touch dawn como si fuéramos de Wisconsin de toda la vida.

Al final, entre fichas de poker, fútbol americano, la radio de fondo, los parroquianos apalancados y las cervezas... aquello parecía más el bar de Moë que otra cosa.

Ganaron los Packers (los nuestros). Se hizo tarde, pero mereció la pena; y a eso de las 4.30, apuramos los tragos, hicimos nuestro particular análisis final del partido, acabaron la enésima partida de poker e hicimos bueno el nombre del programa que sucedía al "especial Carrusel"; amaneció y nos fuimos.

Para animar el lunes podríais poner el espectáculo que montaron lo Black eyed peas en el descanso: impresionante a pesar de Slash y la imagen de Bush y Condoleezza bailando.

Bye2